Actualización de salud comunitaria de RCAHD
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Los miembros de la familia pueden compartir más que apariencias similares. Las afecciones de salud comunes, como las enfermedades cardíacas, el cáncer, la artritis, la demencia, el asma y la diabetes, así como las enfermedades raras, como la hemofilia, la fibrosis quística y la anemia de células falciformes, pueden ser hereditarias. El Día de la Historia de Salud Familiar, que se celebra cada año en el Día de Acción de Gracias, sirve como un recordatorio para hablar con sus seres queridos sobre los chequeos, incluidas las pruebas de detección preventivas, y los antecedentes familiares de afecciones de salud.
Si bien una conversación con los miembros de su familia sobre problemas de salud y enfermedades puede parecer incómoda al principio, tener y compartir esta información importante con su proveedor de atención médica puede ayudarlo a tomar medidas para proteger su salud. Las personas que tienen antecedentes familiares de ciertas enfermedades pueden tener más que ganar con los cambios en el estilo de vida y las pruebas de detección.
Considere iniciar una conversación individual con los miembros de la familia compartiendo por qué espera recopilar la información. Hágales saber que todos pueden beneficiarse de historias clínicas más completas. Es posible que los jóvenes no se den cuenta de la importancia de los factores hereditarios que podrían causar problemas en el futuro. Los parientes mayores pueden saber más sobre las condiciones de salud de la familia, especialmente en aquellos parientes que ya no viven. En el caso de las personas que son adoptadas, es posible que se haya compartido información sobre el historial de salud familiar durante el proceso de adopción.
Los siguientes pasos pueden ser útiles:
Pregúntalo
Pregúnteles a los miembros de la familia qué afecciones tienen o han tenido, y a qué edad se les diagnosticó. Hablar sobre enfermedades crónicas como enfermedades cardíacas y diabetes; condiciones de salud como colesterol alto o presión arterial alta; de dónde son tus antepasados; y las causas y edades de muerte de los familiares de generaciones anteriores. Adopte un enfoque sensible con los miembros de la familia que tal vez no quieran compartir todo o algunas partes de su historial médico. Hágales saber que cualquier información que puedan proporcionar será útil.
Escríbelo
Mantenga un registro de la información que recibe de su familia. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) ofrecen una herramienta gratuita, My Family Health Portrait, para organizar la información y compartirla con su familia y su proveedor de atención médica.
Compártelo
Tener una conversación con su profesional de la salud sobre sus antecedentes familiares puede ayudarlo a comprender lo que esos antecedentes significan para usted y puede informar el momento y la elección de ciertas pruebas de detección. Compartir la información de salud de su familia también puede ayudar a guiar las decisiones personales de salud de otros familiares.
Las investigaciones muestran que nuestra salud general está fuertemente influenciada por una combinación de factores genéticos, conductuales y ambientales. Es importante entender que tener una predisposición genética hacia una afección no significa que necesariamente desarrollaremos esa afección. Comprender la historia de la salud de nuestra familia nos permite estar mejor informados, tomar decisiones inteligentes y vivir vidas más saludables.